Poner el árbol navideño es una tradición proveniente de diferentes países del mundo. Los árboles simbolizan la vida, la abundancia donde quiera que sea, es por eso que han sido y son utilizados con este significado. En los países nórdicos por ejemplo, comenzaron no como símbolo católico. La gente pagana utilizaba los árboles en diciembre para celebrar el nacimiento de Frey, dios del sol y la fertilidad (las fechas eran próximas a la navidad cristiana) El árbol significaba el universo y la copa era la morada de los dioses. Los antiguos germanos creían que el mundo y todos los astros estaban sostenidos pendiendo de las ramas de un árbol gigantesco. En cada solsticio de invierno, cuando se suponía que se renovaba la vida, le rendían un culto especial al árbol. Ellos adornaban el pino con antorchas que representaban las estrellas, la luna y el sol. Cuentan que hubo un Santo (San Bonifacio) que plantó un pino como símbolo del amor de Dios y lo adornó con manzanas y velas, dándole un simbolismo cristiano. Las manzanas representaban las tentaciones y los pecados de los hombres y las velas el amor de Dios, la luz del mundo y la gracia que reciben los hombres que aceptan a Jesús como Salvador. Poco a poco fueron cambiando los adornos del pino de navidad. De manzanas cambiaron a esferas y de velas cambiaron a luces (foquitos). La forma de decorar los árboles varía en cada país. En los países nórdicos las esferas son sustituídas por ángeles y duendes. En Japón decoran con muñecas, adornos de papel, abanicos y sonajeros. En China, en lugar de pinos utilizan naranjos que es un símbolo de felicidad para ellos. En Nepal, me contaba mi amigo Diamond q la gente en su país no acostumbra poner pinos para decorar las casas, sin embargo, el significado de los pinos es el crecimiento espiritual ascendente y la punta es como llegar a lo que ellos llaman Nirvana (salir del karma para alcanzar el éxito) Lo importante de los adornos es que hablen de nuestra fé, de nuestras convicciones y de nuestras familias. Sea cual fuere el inicio de esta tradición, poner el árbol de navidad es siempre un motivo para crear un ambiente de esperanza, paz, armonía, solidaridad y generosidad entre las familias, colaboradores de trabajo, estudiantes, etc.. no es sólo un objeto que se pone en un rincón cada año, lleva consigo muchos significados sobre los cuales vale la pena reflexionar. En mi caso personal, ponemos el pino siempre en familia, es todo un ritual pues colaboramos todos. Ponemos también nacimiento y me encanta cuando ya queda toda la decoración navideña y nos sentamos en la sala a contemplar, a tomar chocolatito caliente y a platicar. El olor a pino, el ambiente, todo se siente diferente. Te invito a que lo intentes…..
Por Marvi.
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